lunes, 12 de marzo de 2012

Preciosa.

Yo te voy a ir a buscar, vos espérame ahí,
Sentada en tu vestido rojo y tus tacones azules que brillan.
Te voy a regalar Nueva York en año nuevo y un poco de Paris en verano.
Te voy a regalar el tiempo de vida que me queda,
porque ser quien yo quiero ser, me impidió ser quien en realidad soy.

No pude amarte porque no quise lastimarte,
Pero vivo desorbitado porque no puedo encontrarte,
No te siento cerca ya, te siento perdida y adolorida,
Como si el mundo se estuviera derrumbando
y no te alcanzara la vida para solucionarlo.
Chocando a mil por hora contra una pared. Muriendo.

Siempre supiste como ser mi extraña de ojos tristes,
Como cautivarme las ideas y encerrarme en tu red.

Me acuerdo como si fuera ayer,
23 de febrero el teléfono sonando otra vez,
"Ella se mató, loco, ella se mató" gritaban del otro lado.

Me necesitabas, ¿no?
¡¿Por qué no gritaste?! ¿Loca desquiciada!

Mejor dicho.. ¿por qué realmente no te escuché?
¿Por qué te abandoné?
Perdón preciosa, perdón.

"Loco, se nos fue, se nos fue"
fue lo último que escuché de vos
No me animé a ir a tu funeral, la responsabilidad me superaba.
No escuché tus gritos de ayuda.
Perdón preciosa, perdón.
Me necesitabas.
Perdón preciosa, perdón.

1 comentario: