lunes, 19 de septiembre de 2011

Someone like you.

Querido Martín:

Soy yo, Lola. Hace tanto que no te veo, que no te hablo, que no te siento. El mundo es un lugar un poco más vacío sin vos, más oscuro, más amargo, más terriblemente solitario. Te extraño y todavía no entiendo como pudiste irte, como lo decidiste, porque lo quisiste. Sé que lo hiciste por el bien de todos, pero no me pidas que te entienda, porque yo no te entiendo. Te amo, pero nunca te supe entender.
Me gustaría poder contarte como va mi vida cotidiana, rutinaria y ajetreada. Me gustaría poder quejarme con vos de cosas estúpidas y sin-sentido, pero que entenderías perfectamente. Cada vez que estaba cerca tuyo, me sentía importante, imponente, valuable. Ahora te fuiste, y te llevaste eso con vos. Simplemente me siento yo, bastante más devaluada, bastante más desmerecida.
Siento que mi camino se transformo en un sendero de tierra, y yo soy una renoleta vapuleada a gas que casi ya no funciona. ¿Qué hago?, estoy a punto de entrar en la crisis nerviosa más grande de todos los tiempos, a punto de expresar mi histeria en toda su expresión, antes todo era más fácil, antes pensaba pero a nadie le importaba, ahora pienso y a todos les importa.. haciendo que de mí se apodere la inmensa y trágica inseguridad, vos tenías respuestas para esto, ¿qué hago?, ¿hay alguna forma de que me respondas?, ¿hay alguna forma de que te conectes telepáticamente conmigo?. Ahora que a la gente le importa lo que pienso, me siento vacía de ideas, rubia, hueca, sin-sentido. Desearía haber podido nutrir mi mente más cuando pensaba que a nadie le importaba, nutrirla de barreras y muros de seguridad y soberbia, pero siempre fui débil, a vos no te voy a mentir tin.
Te amo y te extraño como siempre. No es tan fácil para mí esto.

Lola.

No hay comentarios:

Publicar un comentario