No sos lo mejor que hay en el mundo, pero querés dar amor, dar un hogar, un lugar confortable y cálido para que el otro se sienta feliz, contenido y acompañado. Tenés tus mambos, tus grandes rayes, necesitas a alguien que te ame y te escuche, pero que te de libertad.. que no te ahogue.
Los tiempos duros los sorteaste sola, crees que así es mejor. Tenés miedo de bajar la barrera, de exponerte demasiado y que te lastimen, no podes hacer nada contra eso. Es tu naturaleza, tu historia que te condiciona. No crees que puedas llegar a abrirte tanto con una persona a tal punto de que ya no tengas miedo de que te abandone. Sos extremista, muy, u odias o amas.
Te da miedo la soledad, te da mucho miedo. Te da miedo el futuro y no saber que viene, crees en que después de todo lo malo, viene lo bueno. Estás esperando alguien mágico, que te abrace y el mundo se detenga, estás esperando alguien con sangre caliente, que te tranquilice. Pero no llega más y los intentos fallidos te agobian tanto como la soledad. El mundo parece un lugar bastante sarcástico, cínico e irónico ahora, pretendes creer en el optimismo pero todo no se puede.
Aún así, sin saber quién sos y dudando de quien crees ser, salvas el mundo cada mañana con tu sonrisa, y te morís con cada madrugada.
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